APFELSTRUDEL O STRUDEL DE MANZANA

¡Parece que llega el frío! Después de este maravilloso verano y otoño que hemos estado disfrutando con muy buen tiempo y calorcito, esta semana el termómetro se ha desplomado, en consonancia con las fechas en las que estamos. Por eso ya es inevitable pensar en cocinar platos que nos reconforten y nos ayuden a entrar en calor. Y pensando, pensando, se me ocurrió hacer esta receta de apfelstrudel ó strudel de manzana (como nosotros lo llamamos), pues se toma templado y acompañado con un buen té,¡no me digáis que hay algo más reconfortante que esto! 

El apfelstrudel es un postre originario del centro de Europa, muy típico de Alemania y Austria; precisamente lo probamos en un viaje que hicimos a Berlín y nos encantó, y estando a varios grados bajo cero, cada bocado era una maravilla.

Normalmente lo hacen con manzana, pero también lo he probado con cerezas y almendras, muy bueno también. Si os animáis a hacerlo, os encantará.

 Ingredientes:
* Para la masa:
- 300 gr harina de trigo
- 100 ml de agua
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cucharada de extracto de vainilla
- 1 huevo
- Un pellizco de sal

*Para el relleno:
- 2 manzanas Granny Smith
- 50 gr de mantequilla
- 4 cucharadas de pan rallado
- 4 cucharadas de azúcar
- dos puñados de pasas, sultanas y thompson (sin semilla)
- un chorrito de jerez de vino dulce
- 8-10 nueces peladas
- el zumo de medio limón

- 1 cucharada de canela

- 1 yema de huevo batido para pintar la masa

- azúcar glass para espolvorear

Preparación:

¡Manos a la obra! lo más laborioso es trabajar la masa, pero con paciencia se consigue sin mucho problema. 

En un bol hacemos un volcán con la harina, y en el centro ponemos los demás ingredientes: el agua, el aceite, sal, el huevo y un poquito de extracto de vainilla.

Con calma, unimos todo con las manos, amasamos hasta que consigamos una masa un poco elástica, y que ya no se nos pegue.

Espolvoreamos una encima con un poco de harina y ponemos la masa, que seguiremos amasando y golpeando durante unos 15-20 minutos. Es importante amasar, estirar, replegar una y otra vez, porque lo que necesitamos para esta receta es una masa muy elástica, que podamos estirar al máximo para que quede muy fina.

Una vez terminemos, hacemos una bola y la envolvemos en film transparente, y continuamos con la preparación del relleno.

Cubrimos las pasas con 2-3 cucharadas de jerez de vino dulce y dejamos que se hidraten.

Descorazonamos y pelamos las manzanas y las cortamos en rodajas o cuadraditos, más bien finos, que no queden muy gruesos. Le echamos el zumo de medio limón para que no se oxiden y reservamos.

Calentamos al fuego la mantequilla y cuando se derrita, echamos el pan rallado (usamos pan del día anterior). Dejamos que se dore un poco.

En un bol mezclamos las manzanas con la mitad del pan rallado dorado, el azúcar, la canela, la vainilla, las nueces y las pasas junto con el jerez. Removemos todo bien.

Es el momento de estirar la masa. De nuevo, en la encima espolvoreada con harina, vamos estirando con el rodillo suavemente, intentando darle forma rectangular, aunque luego cortaremos los bordes para darle mejor forma.
Despegamos de la encimera y volvemos a estirar, así unas cuantas veces, para que no se nos rompa.
Cortamos los bordes y espolvoreamos por todo el centro el pan rallado que habíamos reservado.
Encima repartimos la mezcla de las manzanas, dejando libres los bordes de la masa.

Cerramos hacia adentro todos los lados, y con mucho cuidado, la enrollamos desde un extremo hacia el otro.

Si tenéis miedo de que se os pegue a la encimera, podéis colocar la masa estirada encima de un trapo de cocina grande con harina, así os será más fácil enrollarla.

Una vez tengamos nuestro 'rollito', lo pintamos con la yema de huevo. Introducimos en el horno a 180ºC durante 30 minutos aproximadamente. A partir de los 20 minutos recomiendo vigilarlo para que no se nos pase de dorado.

¡Y YA LO TENEMOS!
Cortamos los dos extremos, que siempre quedan algo feos (de paso probamos a ver qué tal nos ha salido...ñam), y cubrimos con azúcar glass al gusto.

Para rematar, podéis acompañarlo con una bola de helado de vainilla, que le va fenomenal, y le aporta contraste de temperatura. Recordad que lo mejor es comerlo templado.

¡Espero que lo intentéis en casa y tenga mucho éxito!